Vende en 90 días

QUÉ DEBES TENER EN CUENTA A LA HORA DE DECIDIR UN PRECIO DE VENTA

• Los metros cuadrados del inmueble y la localización del mismo
• Evolución y perspectivas de futuro de la zona, planes urbanísticos
• Evolución de la oferta y la demanda en el mercado actual, testigos del entorno, sobreoferta, competencia
• Estado de la oferta de financiación presente, movimientos de las entidades financieras y evolución de tipos de interés
• Proximidad de comercios, transporte público, colegios, zonas verdes
• Evolución del mercado inmobiliario

 

QUÉ DEBES METERTE EN LA CABEZA LO ANTES POSIBLE PARA NO “FABRICAR” UN PRECIO ERRÓNEO

• Al comprador no le importa si tienes hipoteca ni a cuánto asciende la misma
• Tampoco le interesa si te gastaste mucho en reformas
• Ni cuánto necesitas para comprar tu nueva casa
• El precio de un inmueble debe basarse en un estudio coherente del mismo y del mercado al que pertenece, no en lo que pide tu vecino por el suyo desde hace un año
• Tampoco ayudará que desempolves una tasación de los tiempos de la burbuja
• Y, por supuesto, olvídate de los sentimientos que puedas tener hacia la casa: nadie va a pagar más por ellos. Es más, el propietario no es objetivo con su propiedad, con lo cual no suele ver sus defectos.

Piensa en a qué precio vas a vender tu casa. Y ahora dime, si fueses un potencial comprador:

• ¿te interesaría adquirirla en el precio que has elegido? Probablemente ¡te harías una contraoferta!
• ¿has estudiado si hay viviendas similares a la tuya con mejor precio?

Recuerda siempre que el vendedor quiere sacar el máximo beneficio al vender y el comprador hacer la compra más barata. El éxito está en localizar el punto que satisfaga a los dos.

QUÉ CONSIGUES SI EL PRECIO QUE ELIGES ES ELEVADO

• Le estás haciendo un favor al resto de vendedores, ya que tu vivienda sirve para que otros propietarios que han ajustado el precio demuestren que la suya es más barata.
• No tendrás visitas. Ni los particulares ni los Apis van a perder el tiempo enseñando un inmueble caro, por invendible.
• Perderás a tus potenciales compradores, que irán eligiendo otras opciones. Incluso aunque estés dispuesto a negociar, estarás fuera de su rango de búsqueda y no recibirás ofertas.
• Tu inmueble se acabará quemando en el mercado. Es decir, que todo el mundo conocerá esa casa cara que lleva un siglo a la venta y que ya mucha gente ha descartado con anterioridad. Las mejores ofertas se suelen recibir el primer mes a la venta, y ya habrá pasado esa oportunidad.
• Y por último, financiar un inmueble cuyo precio está por encima de su valor de mercado es tarea imposible. Difícilmente tendría acceso a una hipoteca.

CUANDO ELIJAS EL PRECIO, QUÉ PALABRAS NO DEBES DECIR NUNCA A UN AGENTE DE LA PROPIEDAD

Por favor, no digas nunca las palabras “No tengo prisa por vender”. Puedes provocar un desmayo, una estampida o un ataque de pánico. El propietario que no tiene prisa es temible porque suele pedir precios desorbitados y además es consciente de ello. La pregunta que un Api se plantea ante tan temible afirmación es: “si no tienes prisa ¿por qué no esperas un tiempo y lo pones a la venta cuando realmente quieras venderlo?”. No debes perder el tiempo ni hacérselo perder a los demás.

En resumen, es un error optar por un precio demasiado elevado ni demasiado bajo, ya que las dos opciones van a hacerte perder dinero. Es importante asesorarse y poder indicar un punto de partida realista que permita el cierre de la venta en un plazo no mayor de los 90 días.

 

Para ello ponemos a tu disposición a nuestros agentes (Peritos y Apis titulados) que pueden asesorarte en tu decisión.

Preparar tu inmueble para venderlo (Home Staging)

Los primeros segundos de la visita al inmueble serán decisivos en la decisión de compra del mismo. Por eso es tan importante prepararlo para que la primera impresión sea buena.

No debe confundirse interiorismo ni al decoración con el “home staging”.  El interiorismo ayuda al uso y habitabilidad de tu casa. El decorador la adapta al gusto del propietario.

El “home staging” consiste en aplicar una serie de técnicas a tu inmueble para que ofrezca un aspecto más atractivo de cara a su venta. Su objetivo del es que la venta o alquiler del inmueble se realice rápidamente y al mejor precio. Por ello la decoración debe ser neutra y estar enfocada al potencial cliente.

Con una mínima inversión se puede extraer el máximo potencial de tu propiedad, reordenando, decorando, o pintando. También realizando las pequeñas reparaciones que se necesiten. En general, el propietario que decide vender se muestra reacio a invertir mucho dinero en mejorar un inmueble del que ha decidido desprenderse.  De ahí que hablemos de una pequeña inversión, un presupuesto reducido que puede dar, sin embargo, grandes frutos. Por todo ello es importante contar con un experto en “home staging”.

Hay una serie de claves que no debemos perder de vista, que son:

• Despersonalizar la vivienda: quitar objetos personales, fotografías, recuerdos, cepillos de dientes…
• Ordenar el mobiliario, recolocar o vaciar. Pensar que menos es más. Si las habitaciones están llenas de muebles es mejor desahogar las estancias para mejorar su aspecto.
• Actualizar mobiliario y decoración: Dar otra imagen, más moderna, usando muebles, textiles, estantes, lámparas, cortinas, elementos estéticos que no serán un gasto sino una inversión.
• Cuidar las zonas exteriores, como el jardín, la barbacoa o la piscina.
• Limpiar y realizar las pequeñas reparaciones o reformas que sean necesarias: bombillas fundidas, carpintería o suelos rotos, etc. Pintar donde sea necesario.
• Cuidar la fotografía: La primera impresión es vital. Las fotografías de los anuncios deben estar cuidadas y ser atractivas.

Con estas pautas conseguiremos más visitas, menos negociaciones, y que algún comprador sienta un flechazo por tu casa. Vender antes y a mejor precio.